Los fantasmas y el espiritismo

Los fantasmas y el espiritismo

El término fantasma se puede definir como una representación visual de una persona que ya ha muerto, existen muchos sitios en donde se han dado estas apariciones, en casas antiguas y diversos lugares donde mucha gente dice haber visto este tipo de fenómenos, los fantasmas siempre tienen una apariencia de siluetas o sombras las cuales se presentan de forma imprevista y son de carácter inmaterial y transparente, en nuestros días la creencia en los fantasmas es poco común.

Pero en el pasado estaba muy generalizada y se pensaba que los muertos volvían a la tierra para espantar a los vivos, ya por envidia o por odio, ya animados de un justiciero espíritu de venganza. La psicología explica estas visiones alegando un aumento de la excitabilidad del sistema nervioso del sujeto, cuya sugestión es tal que creer ver lo inexistente. Sin embargo, los espiritistas creen firmemente en los fantasmas o espíritus malignos o bondadosos, que acompañan a los seres vivos, para estudiar estos fenómenos se ha originado una ciencia llamada el espiritismo, donde se hacen sesiones en las que se agitaban las mesas, se escuchaban ruidos de todo género, aparecían imágenes fosforescentes y llegaban mensajes de ultratumba. Se advirtió
entonces que la presencia de ciertos individuos era indispensable para que el espíritu se manifieste; estas personas, que recibieron el nombre de médiums actuaban como intermediarias para establecer el contacto espiritual requerido.

El espiritismo es la nueva ciencia que viene a revelar a los hombres la existencia y la naturaleza del mundo espiritual y sus relaciones con el mundo corporal; nos lo presenta no como una cosa sobrenatural, sino como una de las fuerzas vivas que incesantemente obran  en la naturaleza, como el origen de una multitud de fenómenos incomprensibles hasta ahora y relegados por esta razón, al dominio de lo fantástico y lo maravilloso, algunas escuelas espiritistas creen que el alma abandona el cuerpo al morir e infunde vida a un nuevo cuerpo y así sucesivamente a través de los siglos, al pasar de un cuerpo a otro, las almas van purgando sus faltas. Sin embargo siempre existirá la duda si los fantasmas existen o es algo propio de nuestra imaginación.